Fotos por Cris Seda Chabrier
Marielle De León, de 33 años, era una persona preocupada por las injusticias sociales que se reflejan en la sociedad puertorriqueña, pero su timidez le impedía involucrarse en las manifestaciones y actividades que las organizaciones feministas coordinaban.
“Antes de salir como Marielle, aunque apoyaba muchos movimientos sociales, yo me sentía tímida y no iba a las protestas o las huelgas que habían en mi universidad. Les apoyaba a distancia, porque no conocía a la gente, no quería meterme ahí y no quería ir sola. Pero, cuando salí como Marielle, dije ‘voy a ir comoquiera‘’. Me sentía más valiente conmigo misma”, expresó De León sobre cómo fue su proceso de convertirse en activista por los derechos de las personas trans y no binarias.
Recuerda que a la primera protesta que asistió fue en 2019. Ahí, conoció a las personas que actualmente integran La Sombrilla Cuir, una plataforma digital que busca impulsar el análisis crítico desde una perspectiva interseccional y visibilizar y empoderar a todas las personas desventajadas. Con elles, fue su primer trabajo como activista.
“La otra protesta grande que participé fue la manifestación que hizo la Cole (Colectiva Feminista en Construcción) al frente del Capitolio (para exigir el Estado de Emergencia). Y después, en marzo del 2019, de una forma accidental, me integré en la Coalición 8 de marzo. Ahora, estoy ayudando a planificar, dando discursos y trabajando activismo. Y otras personas que están organizando protestas también me invitaban”, contó De León.
Pero, hace 10 años, De León ya había mirado hacia el feminismo gracias a une amigue. Ese amigue también sembró la semilla para que la tallerista ahora se nombre feminista.
En estos tres años de activismo, De León ha aprendido que sus ideales no siempre estarán alineados con todas las activistas feministas. Por esta razón, destacó que es bien importante el diálogo para construir unas metas en común, que traten de atajar las violencias a las que sobreviven los grupos más desventajados en Puerto Rico.
Asimismo, mencionó que, como activista, su conquista más importante fue gestar, el 20 de noviembre de 2020, el Día Internacional de la Memoria Trans, El grito colectivo, frente al Capitolio.
“Ese fue el año más violento en Puerto Rico para personas trans. Yo, con la experiencia que tenía haciendo actividades con la Sombrilla y con la Coalición dije: ‘Yo puedo organizar una convocatoria para una manifestación al frente del Capitolio, para visibilizar la frustración de muchas personas trans sobre la falta de acceso a tener vida segura, educación con perspectiva de género y falta de justicia’. Y para lograr esto, tuve que colaborar con diferentes organizaciones que dijeron presente”, dijo la oriunda de San Juan.
De León aspira a una sociedad en la que las personas no binarias tengan la posibilidad de cambiar su identidad de género a género neutral. También, que la perspectiva de género se imparta adecuadamente en las escuelas y que no deje afuera las necesidades de las personas LGBTTIQA+. Además, cree en una sociedad que la soluciones a las violencias no sea el punitivismo y que la gente pueda tener acceso a la justicia restaurativa.
“Que cuando queramos hacer cambio de género y de nombre no tengamos que ir por un proceso tan largo, a veces, violento y costoso para poder hacer esos procesos. Y que sea algo más fácil y accesible. Una sociedad justa es ir más allá de tener leyes que nos protejan. Es también tener leyes que nos dejen acceder a todos los recursos que las personas cis, hetero, normativas ya tienen”, sostuvo la activista.