(Foto de archivo de Ana María Abruña Reyes)
Cerca de 50 personas voluntarias bajo las iniciativas de La Ruta de las Mujeres y Equidad 220 completaron un análisis de los planes de trabajo de los partidos políticos en contienda las elecciones generales de este martes e identificaron serias amenazas al avance de los derechos humanos.
“Entendemos que es urgente llevar la voz de alerta a quienes vayan a ejercer su derecho al voto este 3 de noviembre”, advirtió Isabel Ramos portavoz de la Ruta de la Mujeres, un esfuerzo de apoderamiento y educación política de Proyecto Matria.
El análisis se completó bajo unas preguntas guías sobre la importancia, inclusión y transversalidad de las propuestas en los temas que atañen a las mujeres y a las comunidades LGBTTIQ+.
Invisibilizadas las personas LGBTTIQ+
Entre los hallazgos, el grupo detectó aspectos preocupantes como en el caso de Proyecto Dignidad en que, además de ignorar por completo a las comunidades LGBTTIQ+, no se hace mención alguna de mujeres pacientes VIH positivo, y no proponen nada concreto para las niñas y adultas mayores. Y, aunque reconocen la inserción de las mujeres en el mundo laboral, los derechos que mencionan parecen protegerlas únicamente como cuidadoras, para “atender y criar a los hijos”.
“Las plataformas son documentos que recogen las aspiraciones y los futuros proyectos de ley, reformas y planes de trabajo de quienes pretenden administrar el país. Son además un reflejo claro de lo que cada partido entiende como prioritario. Si han tenido el oído en tierra, deberían recoger propuestas que atiendan las necesidades de las mujeres que conforman el 53% de la población y de las comunidades LGBTTIQ+ que viven en situaciones de vulnerabilidad”, declaró Amárilis Pagán Jiménez, directora ejecutiva de Proyecto Matria.
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Otro aspecto que resalta del análisis es que en la plataforma del Partido Popular Democrático no se hace mención de particularidades de las mujeres en áreas de desarrollo económico, educación, seguridad, salud y COVID-19. Tampoco hay un reconocimiento de las necesidades de la comunidad LGBTTIQ+ ni propuestas para fortalecer y promover derechos adicionales para estos sectores.
“Aunque hay algunas oportunidades para adelantar, nos preocupa las generalidades en algunas de las propuestas como las que se incluyen en las plataformas del partido Nuevo Progresista y el Partido Popular Democrático, mientras que en el Proyecto Dignidad se ignora por completo nuestras comunidades LGBTTIQ+, en un intento muy peligroso por invisibilizarnos”, lamentó el licenciado Luis Conti Rivera, integrante del Comité Amplio para la Búsqueda de la Equidad (CABE) que impulsa la iniciativa Equidad 2020.
Ignoran las necesidades de las mujeres
El análisis también destaca que, en el programa del Partido Nuevo Progresista, el lenguaje es, en su gran mayoría, en referencia a lo masculino. No hay mención de las situaciones que impiden que las mujeres y las personas LGBTTIQ+ incursionen en el escenario laboral.
Asimismo, se propone extender por tres horas el horario escolar para cursos de arte, tutoría, deportes y tecnología, al tiempo en que se ignora por completo la situación histórica en el Departamento de Educación por la pandemia del COVID-19. Por otro lado, se aduce incorrectamente que la violencia doméstica tiene su raíz en problemas mentales, revelando total desconocimiento y sensibilidad sobre las diferencias de poder por razón de género, sobre todo en las relaciones de pareja.
Faltan propuestas para la justicia racial
Las plataformas del Partido Independentista Puertorriqueño (PIP) y Movimiento Victoria Ciudadana (MVC) miran de forma transversal el asunto de las mujeres, trabajan propuestas desde un eje de derechos humanos para construir una sociedad más justa, más equitativa e independiente.
Sin embargo, en el caso del PIP, resalta una oportunidad para trabajar más la justicia racial al igual que las experiencias de violencia hacia las mujeres trans.
Mientras, en el MVC, hay cambios de posturas en asuntos importantes como la educación pública, la Junta de Control Fiscal y la Universidad de Puerto Rico en comparación con las posturas del 2016 de su actual candidata a la gobernación Alexandra Lúgaro.
“Nuestro llamado a las personas votantes es que elijan aspirantes tomando en cuenta este aspecto de la defensa de los derechos humanos que es medular para la vida de todas personas que viven en Puerto Rico, en especial, las que se encuentran en estado de vulnerabilidad”, expresó Ramos Hernández.
El análisis completo está disponible en La Ruta de las Mujeres.