Ante las limitaciones para entrar al supermercado que enfrentan las personas que trabajan en albergues para víctimas de violencia de género, la directora ejecutiva de la Casa Protegida Julia de Burgos (Casa Julia), Coraly León Morales, expuso la necesidad de que se reconozcan como un servicio esencial durante la emergencia de salud pública en la isla.
‘‘Nosotras necesitamos que el servicio que brindan los albergues se visibilice formalmente como un servicio esencial’’, aseguró León Morales durante un foro virtual Violencia de género en tiempos del COVID-19, que organizó, el martes, el Colegio de Abogados y Abogadas de Puerto Rico (CAAPR).
La directora de la Casa Protegida Julia de Burgos indicó que, pese a tener un documento de la Oficina Procuradora de la Mujer que autoriza la entrada de albergues a supermercados de manera expedita, el no ser reconocidas como un servicio indispensable limita que el proceso de las compras sea rápido. Por tanto, se podría perder un tiempo esencial para cumplir con otras necesidades de las mujeres en el hogar.
También, durante este año, Casa Julia recibió un recorte presupuestario de 42%, en fondos gubernamentales, que ha impedido garantizar servicios ante la implementación del toque de queda para evitar la propagación del coronavirus en Puerto Rico.
‘‘Hemos tenido que asumir unos gastos adicionales que no están cubiertos por ninguna subvención para poder garantizar la prestación de servicios en este contexto y que sea una prestación de servicios segura para todas las partes’’, aseguró la líder.
De igual forma, León Morales solicitó apoyo para adquirir artículos para prevenir el contagio del COVID-19 en el lugar. Además, pidió acceso a comida ante la escasez de fondos económicos.
‘‘Apoyarnos con estas necesidades permitiría que nosotras pudiéramos continuar brindando los servicios. Sería tremendo soporte para las organizaciones que hemos asumido brindar servicios de albergue en este contexto’’, indicó.
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Inacción gubernamental contra la violencia de género
Durante el panel virtual, la directora ejecutiva de Coordinadora Paz para la Mujer (CPM), Vilma González Castro, indicó que no ha recibido respuesta por parte de la gobernadora Wanda Vázquez Garced sobre cuáles son los protocolos de las agencias gubernamentales para trabajar con los casos de violencia de género durante la pandemia.
González Castro indicó que organizaciones de mujeres y de la sociedad civil esperan la reacción de la primera ejecutiva tras enviar una carta, en la que exigen información sobre los protocolos en las agencias e implementación de puntos de contacto con las entidades que brindan ayuda a las víctimas. Aseguró también ausencia del gobierno para respaldar a las organizaciones.
‘‘No podemos vivir una pandemia sin tener un análisis de perspectiva de género’’, precisó.
Por su parte, Vilma González indicó que, al tener una exprocuradora de las mujeres como primera mandataria, esperaría más discusión sobre el tema de la violencia de género.
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La intercesora legal Ángela Jiménez mencionó, por su parte, que debido a la falta de empleo durante la actual crisis ha tenido que proveer alimentos a víctimas de violencia de género. Exhortó a la ciudadanía a ser ‘‘solidarios, empáticos y tener humanidad’’ durante la pandemia.
Por otro lado, la abogada Verónica Rivera Torres enfatizó sobre cómo el aislamiento social afecta la salud mental de esta población.
‘‘Esta crisis, en particular, ha tenido un peso en la salud mental de las mujeres por las cargas que siempre hemos tenido y que se han triplicado por el toque de queda’’, aseveró Rivera Torres.
El foro estuvo moderado por la licenciada Juliana Santiago Parrilla, de la Comisión de Víctimas de Delitos del CAAPR.
Línea de ayuda a víctimas de violencia de género 787 489-0022
A falta de una campaña y de acciones coordinadas por parte del gobierno, les ha tocado a las organizaciones asumir algunas de sus responsabilidades. Una de estas es establecer un sistema de prevención y respuesta coordinado. Otra es intervenir ante el Estado para garantizar la atención adecuada de los casos y la protección de las víctimas.
Como parte de un esfuerzo de Proyecto Matria, en coordinación con el Observatorio de Equidad de Género organizaciones y albergues están atendiendo una línea única para ofrecer ayuda a víctimas de violencia de género las 24 horas, los siete días de la semana. El número es 787 489-0022.